martes, 16 de junio de 2015

día rutinario

El sonido del huracán que guarda sentimientos ambivalentes,
shh, que provocan, shh
El todo que pasa por dentro,
mientras la nada se expresa con cara ajena,
extraña,...

irreconocible en el espejo.
Me alejo del yo para converitrme en un cuerpo que toma infinitos caminos al andar.
Porque el cuerpo fragmentado es la salvación que respira
en el devenir constante de este mundo
donde las piezas no encajan y se deben transformar en el universo simbólico de las palabras entendibles
para que el lenguaje sea unánime y no corra riesgos de desvío.
¿Qué sucede con lo que escapa a la monotonía de los días?
Locura, fragmentación, exilio, destierro..y finalmente,
las sensibilidades que copulan en el planeta minusuculo de la existencia